(León, Guanajuato - 1 febrero 2011) - Como una sola familia, los alumnos del Proyecto Niños Don Bosco y del Colegio Salesiano de León, celebraron al Padre y Maestro de los jóvenes. Con la Eucaristía en el Santuario de san Juan Bosco, y un rally en que se mezclaron los muchachos de ambas casas. En cada uno de los 20 equipos se mezclaron grandes y pequeños, y como Don Bosco lo quería, los grandes "apadrinaron" a cada uno de los más pequeños, de modo que la animación corrió a cuenta de educadores y educandos.
La eucaristía - presidida por el P. Hugo Orozco, delegado de Pastoral Juvenil - fue rica en música y colorido, teniendo como profesión de fe el canto de Eduardo Meana: "Creemos en el Dios que ama a los jóvenes". Terminada la misa, todos los chicos fueron premiados con un chocolate y una estampa de Don Bosco, y entre cantos se dispusieron para la foto del recuerdo. La procesión hacia el Colegio Salesiano se desarrolló con cantos, porras y acompañados por una mojiganga de Don Bosco.
Los juegos, planeados por los colaboradores y salesianos de ambas comunidades hizo que la jornada transcurriera en una sana alegría, característica del ambiente salesiano. Al final con un refresco y las buenas tardes del P. Francisco González, director de Ciudad del Niño, terminó la convivencia.
Con esta fiesta culminaron las grandes celebraciones del Santuario Nacional de Don Bosco, que contaron los días precedentes con carros alegóricos, kermés, números artístico-culturales, danzas, castillo y una gran afluencia que asistíó a venerar la reliquia del santo de los jóvenes.
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