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CARTAS A UN JOVEN SIN DIOS

de Ignacio Solares

Un diálogo epistolar entre un joven y el autor en donde se emprende una verdadera aventura al corazón mismo del hombre contemporáneo. Con lenguaje ameno y directo, Ignacio Solares acomete una pesquisa fascinante: la búsqueda de Dios.

SOBRE LA OBRA

La muerte de Dios, como la decretó Nietzsche, representa la gran catástrofe de la humanidad. Pero ¿qué hacer entonces con el afán de trascendencia y la incesante indagación de lo sagrado que asaltan al hombre desde el inicio de los tiempos? Cómo mitigar el vacío, la angustia existencial y el sufrimiento que nos acorralan, sobre todo a los jóvenes, en pleno siglo XXI, en un mundo eminentemente materialista y tecnologizado, donde ya no parece haber lugar para la fe y la genuina experiencia religiosa? Si no existe Dios, ¿todo está permitido?, como dijo Dostoievski.

Con lenguaje ameno y directo, Ignacio Solares acomete una pesquisa fascinante: la búsqueda de Dios. Y para ello echa mano de las ideas de los más importantes penadores, teólogos y filósofos: Kierkegaard, Sartre, Marx, Küng, San Agustín, Freud, Jung, Spinoza, Kant, Hegel y Santa Teresa, entre muchos otros. Mediante la argumentación y el diálogo epistolar con un joven innombrado, Solares emprende un verdadera aventura al corazón mismo del hombre contemporáneo, a través de las dudas metafísicas que apremian a cualquier ser humano en los momentos cruciales de su existencia.

Yo creo –y ésta es quizá mi más profunda creencia- que habría que regresar al mensaje de conciliación de la vida y de la fe, del amor y de la compasión..., donde el único sufrimiento que Dios quiere es el que brota de la lucha contra el sufrimiento mismo. ¡Será posible que más allá (o más acá) de iglesias e instituciones eclesiásticas, los jóvenes, muy especialmente, los jóvenes sensibles como tú, vuelvan a adentrarse en el tema de la fe y el ateísmo, el materialismo y la trascendencia?

SOBRE EL AUTOR

Ignacio Solares nació en Ciudad Juárez, Chihuahua. Estudió en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Fue jefe de redacción de la revista Plural cuando era su director Octavio Paz. Dirigió el suplemento cultural del periódico Excélsior, “Diorama de la cultura”, hasta la salida de Julio Scherer en 1976. También ha dirigido el suplemento de la revista Siempre, “La cultura en México”, desde 1991 y la revista Quimera en su edición mexicana, así como Semana de Bellas Artes. Fue director de Teatro y Danza, y luego director de Literatura, de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, y más tarde Coordinador de la propia dependencia, de los años 2000 a 2004. Es miembro de la Fundación John Simon Guggenheim Memorial, de la cual fue previamente becario. También fue Becario del CME (Centro Mexicano de Escritores) en dos periodos: 1974 y 1979, y es miembro del Sistema Nacional de Creadores del Arte desde 1993.

Es autor del reportaje Delirium Tremens y de novelas como La noche de Ángeles (Premio Diana Novedades, 1989), Madero, el otro y El gran elector, llevada al teatro y por la que obtuvo el premio a la mejor obra del año otorgado por las tres asociaciones teatrales de México. También ha publicado Nen, la inútil (Premio Fuentes Mares, 1996), Columbus, El sitio (Premio Xavier Villaurrutia, 1999), Cartas a una joven psicóloga, El espía del aire, No hay tal lugar (Premio Mazatlán de Literatura 2004), La invasión, La instrucción y otros cuentos, Imagen de Julio Cortázar y Cartas a un joven sin Dios. Dirige la Revista de la Universidad de México y es recipiente del Homenaje nacional de periodismo cultural Fernando Benítez 2008.