Experiencia misionera de Semana Santa

(Guadalajara, Jalisco – 9 de abril de 2010) – Durante la reciente Semana Santa, como es tradición en la inspectoría de México-Guadalajara, además de la preparación y animación de las diversas celebraciones litúrgicas en diversas iglesias y parroquias confiadas a los salesianos y a distintas experiencias para jóvenes como lo es la Pascua Juvenil, un importante número de jóvenes y salesianos han participado en varias experiencias de animación misionera.

Este año han tomado parte en esta experiencia misionera alrededor de 400 jóvenes y unos 20 salesianos que han animado la catequesis y las celebraciones de los días santos en diversas comunidades indígenas de los estados de Oaxaca, Veracruz y San Luis Potosí, así como en algunas localidades cercanas a algunas obras salesianas, en las cuales ordinariamente no se cuenta con la presencia de sacerdotes u otros agentes de pastoral y que son acompañados durante estos días por los misioneros salesianos.

Los jóvenes están organizados dentro de GRUMIS (Grupos Misioneros Salesianos), grupos que durante el año preparan esta experiencia misionera tanto en los aspectos de carácter práctico como en lo que se refiere estrictamente a la formación de sus miembros, ofreciendo la preparación necesaria para realizar su labor en áreas como catequesis, liturgia y animación de niños y jóvenes.

La mayor parte de los jóvenes han estado concentrados en diversas comunidades indígenas o rurales cercanas a la parroquia de San Antonio de las Palmas (Oaxaca), perteneciente a la Prelatura Mixe, y otras comunidades que forman parte de la misma prelatura o de parroquias limítrofes, en una zona caracterizada por ser “frontera” entre tres circunscripciones eclesiásticas: la Prelatura Mixe, la diócesis de Tuxtepec (Oaxaca) y la diócesis de San Andrés Tuxtla (Veracruz).

Además de los jóvenes, forman parte de los 19 GRUMIS, repartidos en 16 ciudades, también algunos padres de familia, mamás catequistas y profesores.

Entre las “misiones locales”, es decir aquellas realizadas por los GRUMIS en zonas cercanas a su propia obra, este año han estado las realizadas en Chihuahua, Ciudad Juárez, Los Mochis, Saltillo y Zamora.

No resulta indiferente el esfuerzo que representa -incluso en lo económico- para cada miembro de GRUMIS realizar esta experiencia, considerando las distancias que hay entre algunos de sus lugares de proveniencia y la zona de misión en la que trabajan durante Semana Santa. Por ejemplo la distancia entre Guadalajara y la parroquia de San Antonio de Las Palmas es de aproximadamente 1050 kilómetros.