“quiero ser el primero en acoger el programa espiritual y pastoral del Aguinaldo y, a través de este mensaje, a modo de diálogo entre vosotros y yo, os ofrezco el Evangelio y deseo haceros ver a Jesús, para que también podáis llegar a ser sus discípulos, testigos y apóstoles”.
Estructurado, en forma de diálogo directo y cordial con los jóvenes, Don Chávez invita a los jóvenes a seguirlo por camino, “porque Jesús camina”, pide buen paso y oídos atentos, en otras palabras, una disponibilidad de corazón y vida.
“Seguir a Jesús no significa tomar una decisión. Significa tomar la decisión. Significa arriesgar todo apuntando sobre una sola meta”. “Estimados Jóvenes, Amigos míos y de Don Bosco, no deben vivir sin saber qué es lo que verdaderamente cuenta, sin saber cuál es el sentido de la vida. Porque la vida es todo aquello que tenéis”.
Don Chávez no esconde que seguir el Reino de Dios sea fácil. Para superar las dificultades que este camino exige debemos “acoger a Jesús”. Llamados para construir una comunidad que, viviendo la eucaristía, se convierte en signo de Cristo, de testimonio. El Rector Mayor invita a hacer más intenso y profundo el encuentro con Jesús y con los hermanos de la misma comunidad.
Estamos llamados a vivir, como María de Nazaret, una total disponibilidad: “Estimados jóvenes, vosotros podéis ser genios, organizadores, inventores, gente famosa, hombre y mujeres de éxito…. Pero todo esto es nada frente a la posibilidad de ser un instrumento en las manos de Dios”.
Es necesario escuchar aquella “semilla” que ha sido puesta en el corazón de todo joven y hacerla germinar.
El texto integral del Mensaje del Rector Mayor al MJS está disponible en más lenguas sobre el sitio web sdb.org.