Se han concluido los festejos por los 25 años de ordenación sacerdotal de los PP. Filiberto González, Salvador Cleofás Murguía, José Mario Díaz Morales y Manuel Gutiérrez. La fecha de su ordenación fue el 11 de diciembre de 1982, en Tlaquepaque, Jalisco; y ahora, un cuarto de siglos después aún resuena la frase que ellos escogieron como lema: "Sacerdotes de Cristo como Don Bosco".
El 15 de diciembre, la cita fue en la iglesia de san Antonio Tlayacapan, a orillas del lago de Chapala, donde se encuentra la casa del Noviciado, donde ellos se prepararon para ser religiosos salesianos, y donde han sido Maestros de novicios el P. Cleo y el P. Fili. Esta celebración fue presidida por el P. Mario Díaz, acompañado además por un nutrido grupo de salesianos de varios puntos de la Provincia. Al terminar la misa, el pueblo hizo una gran fiesta en el Oratorio Salesiano de Chulavista.
Y al día siguiente, hemos tenido la Eucaristía en el Templo de Cristo Resucitado de Tlaquepaque, el mismo donde fueron ordenados hace 25 años por Mons. Braulio Sánchez SDB (q.e.p.d.). La celebración tuvo una nutrida participación tanto de salesianos, como de familiares, hermanas salesianas y especialmente, de mucha gente del barrio que los recuerda con cariño. La celebración litúrgica fue presidida por el P. Manuel, y al término de ésta, la comunidad del Teologado organizó una comida en el Antiguo Aspirantado (hoy Casa de Servicios Pastorales), donde hubo cantos, bailables típicos de Nuevo León y Jalisco y mucha alegría por la convivencia de más de 250 personas.
El P. Filiberto González, es actualmente el Inspector de la Provincia de los Salesianos de Guadalajara; el P. Cleo Murguía funge como director de la casa del Teologado de Tlaquepaque; el P. Mario Díaz coordina la sección secundaria del Colegio Anáhuac Garibaldi en la ciudad de Guadalajara; y el P. Manuel Gutiérrez dirige la casa Valdocco de León, Guanajuato, que es la segunda etapa del Proyecto Niños Don Bosco que busca rescatar de las calles a niños en situación de riesgo.
Los festejos comenzaron desde junio pasado, cuando en la misa de clausura de la Asamblea de la Comunidad Inspectorial, el P. Filiberto presidió la Eucaristía en la Capilla del Antiguo Aspirantado de Tlaquepaque, para dar gracias junto a todos los hermanos de la Provincia por los 25 años de ministerio sacerdotal.
El 1 de diciembre se dieron cita familiares, amigos y hermanos salesianos en la Villa de Guadalupe para encomendar a la protección de María, reina de México y emperatriz de las Américas el ministerio de ser sacerdotes para los jóvenes. Esta Eucaristía fue presidida en la Antigua Basílica, por el P. Cleo. Se recordó que recién ordenados, los 4 sacerdotes se dieron cita en el mismo lugar para encomendar su sacerdocio en las manos de María, y así despúes de 25 años presentaban los frutos de sus trabajos y los retos y esperanzas que tienen para el futuro. Después de la celebración, la familia Murguía organizó una comida muy familiar en donde salesianos, familiares y amigos compartieron agradables momentos.
El 15 de diciembre, la cita fue en la iglesia de san Antonio Tlayacapan, a orillas del lago de Chapala, donde se encuentra la casa del Noviciado, donde ellos se prepararon para ser religiosos salesianos, y donde han sido Maestros de novicios el P. Cleo y el P. Fili. Esta celebración fue presidida por el P. Mario Díaz, acompañado además por un nutrido grupo de salesianos de varios puntos de la Provincia. Al terminar la misa, el pueblo hizo una gran fiesta en el Oratorio Salesiano de Chulavista.
Y al día siguiente, hemos tenido la Eucaristía en el Templo de Cristo Resucitado de Tlaquepaque, el mismo donde fueron ordenados hace 25 años por Mons. Braulio Sánchez SDB (q.e.p.d.). La celebración tuvo una nutrida participación tanto de salesianos, como de familiares, hermanas salesianas y especialmente, de mucha gente del barrio que los recuerda con cariño. La celebración litúrgica fue presidida por el P. Manuel, y al término de ésta, la comunidad del Teologado organizó una comida en el Antiguo Aspirantado (hoy Casa de Servicios Pastorales), donde hubo cantos, bailables típicos de Nuevo León y Jalisco y mucha alegría por la convivencia de más de 250 personas.
Roguemos al Señor por estos hermanos y por todos los demás salesianos, para que fieles a su vocación sean un verdadero signo del amor de Dios para los jóvenes.
2 comentarios:
Lo mío no es un comentario,lo que me gustaria saber es sobre el padre Horacio Pérez y Pérez
mi nombre es javier silva y Estoy buscando al padre Jose Garcia
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